¿Cómo llegué aquí?
Vengo de una familia grande, mis papás tomaron la decisión de tener 7 hijos sin necesariamente medir las consecuencias financieras (cosa que hoy agradezco porque tengo una familia impresionante). La inestabilidad financiera que vivimos en mi casa afectó a todos mis hermanos de manera distinta, pero a mi me llevó a guardar mis sueños y pasiones en un cajita (muy en contra de lo que mis padres hubiesen querido para mi), y a enfocar mis estudios y carrera solo a generar estabilidad económica, lo que no sabía en ese minuto es que estaba renunciado a mis sueños por un pedazo constante de pan.
Cuando se renuncia a los sueños, el tiempo te hace saber que independiente de lo que logres en la vida, hay algo que te falta. Fue así como tomé mis ahorros y decidí ir a hacer un MBA a Australia, miedosa como soy, tenía los ahorros suficientes para pagar el programa y vivir los dos años completos sin tener que trabajar.
Al poco tiempo de llegar a Australia me empecé a aburrir y encontré un trabajo de medio tiempo como cajera en una tienda de artículos de cocina, el mejor trabajo que he tenido en mi vida, ya que no solo me daba tiempo para pensar, sino que exploraba partes de mi creatividad y capacidad comercial que ni yo sabía que tenía. Lo más importante es que con este trabajo soñado, lograba pagar el arriendo y solo sacaba una parte pequeña de mis ahorros para vivir, incluso muchas veces logré vivir de los dividendos.
Al pasar el tiempo me di cuenta que este estilo de vida, tranquilo pero estable y creativo me daba una felicidad impresionante. No necesitaba viajar, no necesitaba comprar cosas inútiles, tenía paz, tiempo y ganas para desarrollar mi creatividad.
Luego de dos años, volví a Chile, pero esta vez yo venía con un plan, este a diferencia de lo que pensaba antes, ya no era hacerme millonaria con un emprendimiento sino que usar las herramientas que ya tenía para lograr mi libertad financiera y así vivir para siempre en el paraíso hacer las cosas por gusto y no por miedo.
Mi plan tenía tres pilares fundamentales: Empecé a trabajar en inversiones, para entender un poco más cómo maximizar mis ingreso y retornos de inversiones, me propuse ahorrar lo más posible por algunos años, buscando las mayores eficiencias en impuestos y busqué proyectos que pudieran desarrollar mi creatividad y a su vez me dieran tiempo para dedicarme una vez que se terminara el período de ahorro. Y así nació SimpFin, con la idea de poder ayudar a otros a dejar de vivir amarrados al trabajo y poder lograr tener una vida más completa y feliz